La realidad no es monolingüística. Es decir, en la comarca no se habla un solo idioma. Tampoco dos. Se hablan muchos. La realidad es polifónica. Y el euskera debe saber negociar con esa realidad polifónica. No sabemos si conseguiremos que el euskera sea el puente que una los diferentes idiomas que se hablan en la comarca. Pero deberíamos esforzarnos en ello. Desde este punto de vista, da gusto ver cómo los inmigrantes cogen el Kronika.
De momento, las personas que han venido del extranjero no son euskaldunes. Pero sus hijos/as sí; y con todo el significado que tiene la palabra euskaldun. Para los/as euskaldunes, euskaldun es la persona que habla en euskera, aun habiendo nacido en el extranjero. Por ejemplo, los padres del euskaldun que ha creado el dominio .eus son gallegos. Tenemos el convencimiento de que los padres que hablan otros idiomas, algún día, serán euskaldunes.
El Kronika de hoy es algo similar a un trato, convenio o pacto. En el Kronika de hoy se les ha cedido un pequeño espacio a los demás idiomas, y serán las personas que hablan esos idiomas las que divulguen el Kronika entre los no euskaldunes. Estamos seguros de que así será. Tenemos su palabra.
Y no sólo tenemos su palabra, nos han enseñado algo más: las personas que han viajado desde Euskal Herria a los campamentos de refugiados en Tindouff se han encontrado con una gran sorpresa. Los refugiados de Tindouff mostraban como su bandera el cuento ‘Chertat eta lehoia’, publicado por Dobera, junto con los saharauis. A eso nos referimos cuando decimos 'Eman ta zabal zazu munduan frutua' (divulga el euskera por el mundo).
Dobera-Kronikako Zuzendaritza eta langileak